Aviación News ¦ Edición nº 394 ¦ Jueves 22 de marzo de 2012

CARRASCO: TECNOLOGÍA Y ARQUITECTURA UNIDAS PARA UNO DE LOS AEROPUERTOS
MÁS LINDOS DEL MUNDO (Cont.)

Con un diseño innovador -mérito del reconocido arquitecto uruguayo Rafael Viñoly-, Carrasco fue acumulando reconocimientos y llegó a formar parte de los cuatro finalistas del prestigioso certamen aeroportuario Frontier Awards, de la revista londinense Frontier, compitiendo con el aeropuerto de Abu Dhabi, de Emiratos Árabes; el de Copenhague, Dinamarca; y el aeropuerto londinense de Heathrow. Ya la reconocida revista “Travel & Leisure” lo había catalogado como el cuarto aeropuerto más lindo de todo el planeta sólo después de la Terminal 3 del aeropuerto internacional de Beijing, la T4 de Barajas, Madrid, y la TWA Terminal, del JFK de Nueva York.

Para Martín Eurnekian, Presidente de Puertas del Sur: “La armonía entre la estética y la eficiencia operacional es lo que se destaca de este aeropuerto. Si tuviéramos algo muy lindo pero que no funciona o complica la operación, la gente no lo disfrutaría y no generaría el confort que hace que sea premiado. El nuevo Carrasco conjuga tanto eficiencia como layout operativo para funcionar muy bien y eso creo que es sinónimo de éxito. Los reconocimientos tienen una relevancia en el negocio incuantificable. Es nuestro orgullo y parte de las credenciales de Corporación América en su legajo y registro de éxitos en gestión. En definitiva, es muy útil para mostrar al mundo quienes somos y que podemos hacer”.

En el hall de entrada del aeropuerto, el lema "Uruguay bienvenido al mundo, mundo bienvenido a Uruguay" recibe a quienes transitan por allí. La terminal ocupa una superficie de 45.000 m² y está cubierta por una cúpula vidriada de más de 400 m. de longitud, -premiada en París por el “Jec Innovation Award”-, que permite que la luz natural inunde el interior de la estación. La estructura externa requirió un desarrollo especial para poderlo adaptar a las características y exigencias del desafiante proyecto. Como si todo esto fuera poco, el nuevo edificio aeroportuario uruguayo ya había sido distinguido por el Royal Institute of British Architects, como una de las obras que contribuyen al cuidado del medio ambiente y posee estándares superiores de calidad, diseño y funcionalidad.

Todas estas características llevaron a que el operador aeroportuario reciba hoy más de la mitad de sus ganancias por ingresos no aeronáuticos, un nivel difícilmente alcanzable en otras terminales de la región. Parte de esos ingresos se perciben gracias a la terraza vidriada de acceso público donde no es extraño ver durante los fines de semana a familias enteras que, por supuesto mate en mano, pasan las tardes viendo salir y llegar a los aviones, como seguramente generaciones anteriores lo hacían desde la recordada terraza abierta de la vieja terminal. Allí se realizan a su vez importantes eventos, transformándola casi en un centro de exposiciones donde se llevaron a cabo desde desfiles de moda hasta presentaciones de productos que buscan replicar para sí mismos los conceptos asociados al aeropuerto.

“Parte de nuestro plan era no depender de los ingresos aeronáuticos, si bien al final, la cantidad de pasajeros es la determinante de todos tus ingresos. Es lo que te trae tráfico de gente que es la que termina consumiendo. Desde el principio fue uno de nuestros objetivos aprovechar todos los ingresos posibles, teniendo en cuenta la operatividad, la seguridad y el confort del pasajero pero al mismo tiempo todos al servicio de generar ingresos. Es algo innovador que nos permite la estética del aeropuerto al ser un lugar tan lindo y agradable que hace que las empresas quieran asociarse con esta imagen. Queremos tener el mayor ingreso por pasajero posible de los ingresos que el pasajero da voluntariamente y recibe valor agregado de nuestra parte poniendo menos presión en las tasas y fomentando el trafico”, recalca Eurnekian.

Las obras para el “Nuevo Carrasco” contaron con una inversión cercana a los U$S 200 millones para tener capacidad de recibir a 5 millones de pasajeros anuales, duplicando la capacidad anterior de la aeroestación. El edificio del aeropuerto está ubicado paralelo a la Pista principal (06-24), la cual fue extendida a 3.200 m. de longitud, permitiendo así la operación de vuelos intercontinentales.

Desde Puertas del Sur afirman que según el pliego de licitación, la empresa tenía la obligación de hacer en superficie algo tres veces más chico y en cuanto a funcionalidad algo 10 veces menor, en una operación en planta baja como nivel operativo y un medio nivel para poder incorporar mangas. Martín Eurnekian agregó: “Nosotros transformamos esos 16.000 m² en un nivel y medio que pedía el pliego en 45 mil m² en dos niveles y medio, lo que operativamente es muy diferente y genera una eficiencia y una seguridad mayor. Esa fue nuestra apuesta al crecimiento de la región, principalmente de Uruguay que ofrece una capacidad financiera y un marco legal que permitieron una inversión a largo plazo”.

La terminal se distribuye en dos niveles principales que ofrecen vialidades diferenciadas y dedicadas para los flujos de arribos y partidas, respectivamente. A su vez provee un sistema de manejo de equipaje para partidas que consta de cintas automatizadas que transportan el equipaje de bodega desde el área de check-in hasta el patio de equipajes de salidas, pasando previamente por el entrepiso técnico, donde atraviesa una serie de controles de seguridad en máquinas de rayos-x en forma automatizada. Entre los proyectos en estudio a futuro -factible dentro de unos tres o cuatro años-, quizás uno de los más emblemáticos refiere a los planes de la compañía de incorporar energía eólica y solar para la provisión del aeropuerto tratando de llegar a tener un 100% de energía generada renovable. Se trata de un proyecto conjunto entre Puertas del Sur y otra compañía del grupo Corporación América dedicada al desarrollo y provisión de energía eólica que se encuentra en fase de validación técnica y económica.

Desde el primer boceto, la idea que guió el diseño y la construcción del nuevo aeropuerto fue hacer una estructura que, "como una catedral, muestre a la vez modernidad, progreso y amparo". A decir por los logros conseguidos, parece haberlo conseguido.